¿Quieres hacer historia? Escríbela.

No sé a ti, pero a mí me vuelve loco conocer los relatos de las grandes empresas, de las marcas, de los artistas, de las personas.

Quizás por eso suelo ver documentales, biopics y leer libros que no sean de ficción. 

Las historias reales tienen siempre la magia de crear imágenes dentro de nuestra cabeza con las que nos identificamos y con las que podemos visualizarnos como los protagonistas.

Durante los años que llevo dando consultoría de marca personal, me ha tocado vivir y sentir experiencias prestadas verdaderamente increíbles. 

Y aunque algunas sí llegan a tocar lo extraordinario, la mayoría vienen de personas de carne y hueso bastante comunes como tú y como yo.

Pero ninguna,

Óyeme, ninguna,

es aburrida. 

Todos, absolutamente todos, tenemos drama en nuestras vidas. 

Y eso, es oro molido para la escritura. 

Y para las ventas.

El pastel de zanahoria que vende Laura en su local es bastante bueno. También el café y en general todo lo que ofrece. 

Pero lo que hace que la gente se forme todos los días para sentarse en una de sus 12 mesas no son los bollitos calientes ni la decoración. Tampoco el reducido y selecto menú. 

Es la historia de Laura. Quien estaba decidida a ser arquitecta. Pero a la mitad de sus estudios su padre enfermó y ella se dedicó a cuidarlo y a consentirlo.

Rubén, su adorable papá, era muy dulcero. 

Le encantaban los postres y particularmente el pastel de zanahoria que Laura aprendió a hacerle durante los 2 años que estuvo enfermo. 

Y antes de morir le pidió que nunca dejara de hacer repostería, que no privara al mundo de ese cariño convertido en postre.

Así lo hizo. Y aunque casi desde el principio tuvo una cantidad interesante de clientes, no fue hasta cuando le sugerí compartir su historia, que su negocio tuvo el éxito que hoy tiene.

Tú, al igual que yo, al igual que Laura, tienes una gran historia. 

Solo necesitas escribirla para compartirla y hacerla grande.

Para eso y muchas cosas más, existe la guía ESCRIBIENDO ES QUE VENDE LA GENTE.

La puedes hacer tuya por solo 150 dólares. 

Claro, si la compras en los próximos 27 días. Después será más cara y luego simplemente no la podrás comprar.

Esa sí que sería una historia dramática. 

Para ti.

La compras hoy, ahorras una lana, te llega en octubre y empiezas a escribir tu vida.

Para vender.